Que Vietnam deje de consumir carne de perro y se respete la figura de esta grandiosa especie en todo el país.

Vietnam se caracteriza por ser una Repúbica Socialista y un país comunista donde los multimillonarios se multiplican. Ha ido superando su situación de pobreza, sin embargo entre sus habitantes se sigue consumiendo carne de perro a pesar del descontento de varios países, los cuales lograron crear peticiones con millones de firmas. Aunque algunas autoridades a través de funcionarios crearon situaciones de alerta por el riesgo de propagación de rabia o leptospirosis, no cesan las crueles muertes expuestas al público infantil y adulto. La brecha entre ricos y pobres se agranda, no obstante ambos sectores poseen un punto en común: El consumo de la carne de un animal que amamos por medio de stands, establecimientos pobres y de lujo. Un gran abanico que abarca todas las posibilidades dentro de un estado que, aunque capitalismo y comunismo sean términos contradictorios en los medios, reúne puntos de ambas corrientes, acompañados de un marxismo infranqueable, pero que se puede llegar a romper si nos concienciamos y luchamos con perseverancia en la misma dirección. Se necesitan menos de dos horas en Vietnam para encontrar este tipo de carne. Si permitimos este tipo de consumo, se acabará normalizando el de la carne humana. No estamos evolucionando.

Se ruega que Vietnam deje de consumir carne de perro y respete la figura de esta granciosa especie que siente, quiere y ayuda. El amor de un perro es incondicional. Como acompañante, proporciona felicidad, seguridad y responsabilidad. La desaparición del estrés, una buena salud cardiovascular y las resistencias a las alergias no se consiguen consumiéndolo, todo lo contrario, se consiguen teniéndolo al lado y varios estudios lo demuestran. Por desgracia, más de 1.000 establecimientos venden carne de perro en Hanoi, 175 en Saigón, suma y sigue. Dicho consumo se dispara porque gobiernos de otros países son responsables de importaciones dando a entender así que lo promueven en vez de prohibirlo favoreciendo así a la élite. En Filipinas, China, Indonesia, Corea del Sur y Tailandia habita población de origen vietnamita que consume carne de perro. Está de moda disfrazar la tortura de supuesta cultura. La carne de perro es tan popular en Vietnam debido a que el país fue ocupado por los chinos durante casi 1.000 años. No se trata de una tradición, sino de una raza problemática.

Existen todo tipo de imágenes en la Red para designar gráficamente esta petición, pero todas contienen perros asados, vivos en pesas o balanzas, enjaulados o descuartizados. Un auténtico horror. Pensar que innumerables perros han muerto así rompe el alma y el corazón. La fácil difusión de estas imágenes son un mal ejemplo y lo que se llama censura, no es más que una protección para evitar repeticiones innecesarias. La imagen que finalmente figura en la presente petición corresponde a un veterano de Vietnam que amaba a Ramo, su perro fiel y compañero de guerra. Jim y Ramo lucharon para que Vietnam no fuese lo que es hoy. Lucharon contra el comunismo, el socialismo y el marxismo. Los perros que murieron para ser comidos deben tener su justicia. Nosotros somos su voz.

'Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales'. - M.G.

ACTUALIZACIÓN 15/10/2019.

Esta petición va a prescindir de foto porque en referencia a la escogida, Sosvox decide censurarla de forma continua sin motivo aparente para colocar otra de contenido desagradable en su lugar.

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