No a La Tracción a Sangre Animal!
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Dirigida a: presidencia@senado.gob.ar y 4 más
Me dirijo a la Sra presidenta de la Cámara de Senadores y Diputados de la Nación Argentina y a todas las autoridades que velan por el bienestar de la fauna en general de este país, para solicitar que se ponga fin a la tracción a sangre equina que infringe la Ley de protección animal 14.346 en todos sus aspectos y también las leyes que prohíben el uso de carros en áreas urbanas, la explotación de trabajo infantil y los estados de ebriedad de muchos conductores de dichos carros, por citar sólo algunos de los innumerables delitos que se infringen al utilizar carros propulsados por caballos.
Éstos nobles animales son torturados y explotados de las formas más crueles, sádicas y perversas que se puedan pensar, los cuales son obligados a trabajar durante todo el día sin descanso alguno, sin agua ni comida y recibiendo constantemente latigazos, golpes de puños en sus ojos, en sus cuerpos con todo tipo de objetos contundentes, los cuales los hieren de gravedad e incluso pueden ocasionarles la muerte por tanto maltrato desmesurado.
Las yeguas son explotadas a tal extremo, que las hacen cargar sobrepesos aún estando preñadas y muchas paren sus crías atadas a los carros, y sus crías son sustraídas a la fuerza por sus patas traseras, fracturándolas o causándoles infecciones, hemorragias y hasta sacándoles el útero afuera por bestialidad de querer deshacerse de la cría que les "estorba" para seguir haciéndola trabajar a la madre.
Los caballos pequeños, los ponys también son explotados y torturados en todo sentido, desde aberrantes exhibiciones como atracción para "fotos con turistas" hasta la carga de carros que doblan su peso y tamaño, los cuales también están obligados a llevar a la fuerza, por medio de golpes salvajes y aberrantes.
Ya se presentó un proyecto de Ley en contra de ésta tracción a sangre equina, la cual ya fue aprobada pero todavía no se hace cumplir como debería ser en todas las ciudades de Argentina y en todas las localidades y municipios.
Ésta ley debe ser aplicada y su transgresión castigada penalmente como lo estipula la Ley de protección animal que establece el Código penal de la Constitución.
Los caballos que son seres sintientes, capaces de tener todo tipo de sentimientos y emociones como cualquier otro animal, deben dejar de ser esclavos y de ser utilizados como instrumentos de carga, soportando todo tipo de maltratos por individuos que no sólo los torturan a ellos, sino también a sus propios hijos que los hacen trabajar siendo menores de edad, y privándolos de la educación obligatoria sino también formando en ellos desde la temprana infancia, una carencia de sensibilidad y empatía hacía el sufrimiento de los animales, cuya formación adulta devendrá en ser futuros delincuentes, asesinos y/o psicópatas irremediables en el futuro.
No más T.A.S en Argentina ni en ningún otro país!
Que ésta Nación camine hacia el progreso con un futuro próspero libre de todo tipo de maltrato animal.
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