Hacer valer los derechos de los animales comunitarios (insertados en la Ley Estatal 21.970)

Cuando en 2013 fue creada a la primera Delegación Especializada de Investigación de Crímenes contra la Fauna de Minas Gerais, muchos pensaron que sería un avance, pero no lo fue. Cuando en 2016, el gobernador Fernando Pimentel, promulgó la Ley Estatal 21.970, muchos pensaron nuevamente que sería un avance, pero de nuevo, no lo fue.

Quien ayuda a los animales o intenta, sabe que cuanto más grave sea la situación del animal, sea en caso de abandono, negligencia o riesgo de vida, mayor es el desamparo por parte de la Ley. Yo siento esto en la piel, pues cuida comunitariamente, ofreciendo alimento y agua fresca, diariamente, para cerca de once gatos que viven en mi calle (ubicación: Rua Brasil Tri Campeón, Barrio Dom Cabral - Cerca del punto final del autobús 9414 - Belo Horizonte / MG). Todos pertenecían a un vecino que falleció, pero que, mientras vivía, no cumplió con ninguna de sus responsabilidades de tutor.

Los animales están en la calle, siendo víctimas de la maldad y falta de comprensión de la vecindad, que los quiere lejos y además de no ayudar, todavía quieren impedirme de alimentarlos. No se ha tomado ninguna medida para protegerlos. En contacto telefónico con la Comisaría de Investigación de Crímenes contra la Fauna, sugerí que colocar una placa con el número de la Ley respectiva en el lugar donde los alimento, como forma de intentar concientizar a la población y hasta esto me fue negado! A diferencia de lo que sucede en otras ciudades, donde las notificaciones se envían a los residentes del barrio a ser conscientes de las Leyes que amparan a los animales, de los crímenes que han configurado malos tratos y de sus castigos, para tener ciencia y si, siguen practicando, En el Ministerio Público y apertura de una acción judicial, aquí, nada fue hecho por la policía y aún tuve que oír que la Ley en relación a los animales es débil y que sólo habría investigación en caso de muerte / envenenamiento, qué justamente estoy buscando ayuda para evitar que suceda!

Sr. Gobernador Fernando Pimentel, la Ley 21.970, fue promulgada, pero todo lo que en ella consta necesita ser cumplido, como en el caso de los perros y gatos comunitarios, que, debían ser recogidos en los términos del art. 5º, esterilizados, identificados y devueltos a la comunidad de origen por el órgano competente. Cuando algún órgano competente vendrá hasta aquí a buscar a los gatos para castrarlos? Hoy son once, si no se esterilizan, mañana este número se multiplicará, así como el abandono y los riesgos que corren.

Una de las hembras quedó preñada y yo conseguí que fuera adoptada y no diera a luz en la calle, pero desafortunadamente son muchos gatos y necesitan la atención del Ayuntamiento. Los Centros de Control de Zoonosis de la ciudad, sólo realizan la cirugía de esterilización, no permiten que el animal permanezca allí hasta recuperarse para entonces, ser devuelto a la comunidad donde vive. Lo que se vuelve inviable cuando la cantidad de animales es mayor y no hay apoyo de un órgano competente, sea con transporte, medicamento o hospedaje. No es justo que depositen en la espalda de protectores, simpatizantes a la causa animal y ONG's, responsabilidades que son del municipio y del Estado.

Espero que la Ley salga del papel y comience a realizarse por la protección y el bienestar de los animales!

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